Los que somos autónomos sabemos que para poder recuperar el importe del IVA que pagamos al comprar bienes o servicios para nuestra actividad es necesario tener un documento que lo justifique. Este documento es una factura.
Hay dos tipos de facturas pero no nos sirven por igual. Tenemos las facturas completas y las facturas simplificadas. La diferencia entre ambas está principalmente en los datos siguientes:
En los datos que identifican al comprador. Es decir, el nombre completo, DNI iy dirección del comprador.
El tipo de producto o servicios adquirido.
El importe del IVA aplicado a dichos productos o servicios.
Todos estos datos aparecen en una factura completa. En cambio no aparecen en una factura simplificada. En este otro artículo te explicamos mejor las diferencias entre los dos tipos de factura y cómo puedes identificarlas para registrarlas correctamente en tu contabilidad.
Respecto a cómo puedes recuperar el IVA de las facturas de gastos o compras de tu actividad. Tienes 3 opciones:
Pedir siempre una factura completa por cada compra que realices.
Solicitar que te sustituyan la factura simplificada por una completa
Solicitar que te completen la factura simplificada. Te pongo un ejemplo:
Hay muchas situaciones de nuestro día a día donde nos entregan una factura simplificada como regla general. Cuando comes en un restaurante, coges un taxi o compras en un centro comercial... En todos estos casos no te entregan una factura completa salvo que la pidas.
Para poder recuperar el IVA de estas compras tendrás que pedir que te pongan en la factura simplificada los datos siguientes:
Tu nombre completo, DNI y tu dirección
El importe de IVA que te han aplicado.
Se trata de ampliar la información que contiene la factura simplificada para convertirla en deducible y así recuperar el IVA.
IMPORTANTE: No puedes poner los datos que faltan tú mismo. Si Hacienda te comprobase lo primero que haría seria ver si es tu letra. Tiene que ampliar la información quien te entrega la factura y se admite que la escriba a bolígrafo.